PRI
Tendencias mundiales sobre encarcelamiento 2021
Los riesgos que el COVID-19 implica para las personas privadas de la libertad y el personal que trabaja en prisiones afectadas por la sobrepoblación y el hacinamiento, fueron reconocidos desde los primeros momentos de la pandemia. Figuras prominentes de las Naciones Unidas (ONU) y de los gobiernos hicieron declaraciones resaltando el riesgo para la vida y la salud en las prisiones y, tal como se describe en Tendencias mundiales sobre encarcelamiento 2021, la mayoría de los países implementó algún tipo de liberación de emergencia para reducir la población penitenciaria. Mientras los países continúan navegando a través de nuevas olas de contagio, las prisiones siguen siendo semilleros para la transmisión del virus. También la creación de nuevos delitos por infringir las regulaciones por COVID-19 y la reanudación de los procesos en los tribunales han incrementado los números de las prisiones.
Los desafíos enfrentados por las prisiones en el último año son el fruto de décadas de financiamiento y de reforma al sistema de justicia penal inadecuados. La pandemia ha puesto en evidencia el impacto del hacinamiento y de la falta de recursos de las prisiones en sus términos más graves: a través de la pérdida de vidas. Lamentamos cada muerte, de las personas privadas de la libertad y del personal, y alentamos a todos los actores a aprender de la experiencia del año pasado, como se detalla en Tendencias mundiales sobre encarcelamiento 2021, para garantizar sistemas penitenciarios que protejan los derechos humanos de las personas detenidas.
Las crisis sanitarias y otras emergencias no son nuevas en las prisiones. El Enfoque especial de este año examina las prisiones en crisis y cómo las autoridades responden a las crisis de salud, los riesgos naturales y el clima extremo, o a los contextos frágiles y afectados por el conflicto. Examinamos cómo las prisiones y las personas adentro de ellas son afectadas, así como el involucramiento de las poblaciones penitenciarias en los tiempos de dichas crisis, y consideramos qué medidas pueden implementar las autoridades para una mejor preparación y respuesta.